Elena Espeso

Elena Espeso - Atleta olímpica vallisoletana
Atleta olímpica vallisoletana

Hay que querer lo que uno hace con el corazón 

Elena Espeso, nació un 10 de octubre de 1972 en Valladolid. Es la mayor de cuatro hermanos: Nando, Luis y Cuca. Sus padres, Marisa y Casimiro, iconos y modelos a seguir en su camino personal y profesional, la llevaron a estudiar desde el Jardín de Infancia hasta BUP, en el colegio Las Agustinas de Valladolid. Su última etapa formativa, el antiguo COU, lo cursó en otro centro educativo de la capital vallisoletana, el Lourdes. A los 17 años entró en INEF en León y tras cursar los 5 años de esta carrera (Promoción 90-95), decidió prepararse la oposición para ser profesora de Educación Física, examen que aprobó en Badajoz en el año 1996.  

Gracias al deporte de la orientación conoció, al que hoy en día es su marido, “Pincho”. Tras siete años en Extremadura (desde 1996 hasta el 2003), Elena se trasladó por amor, a la Comunidad de Madrid, capital en la que reside en la actualidad y en la que han formado una familia tras la llegada de sus dos pequeños, Elena (2005) y Lucas (2008).

-Usted es madre, profesora y una gran atleta de élite. ¿Cómo se hace y no se rinde ante las adversidades que estas palabras llevan implícitas entre sí?

-Poniendo el corazón en todo lo que haces. Mi lema es: “Querer lo que haces”. 

-¿Si tuviera que elegir una profesión, con cuál se quedaría y por qué? 

-Me quedaría con la profesión que actualmente ejerzo, la enseñanza de Educación Física a chicos de Secundaria. Si volviera a nacer, nada me gustaría más que repetir y preparar las oposiciones a Secundaria. ¿Por qué motivo? Pues bien, la enseñanza es apasionante y la de Educación Física, más aún. La actividad física es vital en la vida del hombre; si no nos movemos, morimos. A esas edades (de 12 a 17 años) el deporte es un medio para hacer amistades, crear hábitos, pensar en otra cosa que no sea tabaco, alcohol, drogas, etc. Hay tanto que decirles y tanto por hacer con ellos… 

-¿Cómo se llega a ser una deportista de primer nivel? 

-Lo cierto es que no me considero, ni me he considerado nunca, como tal. Simplemente, me encanta correr y aposté por ello.

-¿El equilibrio emocional tanto en lo personal como en lo deportivo deben de ir unidos? Ó ¿son dos conceptos separados?

-Mayormente, sí. Lo digo porque, a veces, el correr te evade de tensiones, emociones negativas, angustias, problemas personales… Si te encuentras bien físicamente, puedes luchar con todo y contra todo. Lo ideal es que estés bien emocionalmente, pues el rendimiento es mucho mejor, pero si algo se tuerce en tu vida, el correr (o mejor dicho, la actividad física) es el mejor medio de evasión, la válvula de escape. Cuando regresas de esa actividad, ves las cosas de otra forma, las afrontas con mejor carácter, tienes más ordenada y organizada la cabeza, resuelves problemas, desaparecen las tensiones. Y, si, además, el tiempo acompaña con sol y buena temperatura, se convierte en tu mejor terapia. Yo animo a la gente depresiva a que haga cualquier deporte, cualquier actividad física, para sentirse “mens sana in corpore sano”, máxima de Juvenal.

-¿Cómo y cuándo se enteró que iba a participar en unos Juegos Olímpicos? ¿Quién fue el responsable de comunicárselo? ¿Cuál fue su primera sensación ante esta noticia?

-Fue muy gracioso. Estaba dando clase en el IES, concretamente, bailes de salón a los chavales de Bachillerato. Aquel día estaba pendiente de que se publicara la noticia en la circular de la página de la Real Federación Española de Atletismo, así que, les dejé los cinco minutos de final de clase para ir al baño, cambiarse, etc, … y aproveché a meterme en Internet. Cuando lo ví, se lo comuniqué a ellos en primer lugar y les dije que, para celebrarlo, les dejaría en la siguiente clase “juego libre”. A partir de ahí, ya se enteró toda España. Fue una sensación muy satisfactoria y tranquilizante, pues había conseguido un sueño que, hacía años, era impensable; vamos, ni se me hubiera pasado por la cabeza.

-¿Qué ha significado su paso por los Juegos Olímpicos de Londres y más teniendo en cuenta el contratiempo que tuvo con la enfermedad E-Coli?

-Un antes y un después en mi vida deportiva. Antes, no se me conocían apenas; después, hasta me paraba la gente por la calle, cosa que no estaba acostumbrada y de lo que nunca me acostumbré.

-¿Cómo valoraría su actuación en los Juegos Olímpicos?

-Sabor agridulce, pues di todo lo que pude, sin embargo, mi resultado no fue el que yo quise, a pesar de haber quedado segunda española. No sé si tuvo que ver con una infección de orina que me detectaron en unos análisis previos a los JJOO en la RFEA. Fui bien preparada por mi entrenador Antonio Postigo y por mi “liebre” Ludisvindo Romero, pero no salió todo lo que entrenamos.

-Podemos decir, que su participación en estos Juegos, ¿ha sido lo más importante de su trayectoria deportiva? Y a nivel personal, ¿qué repercusión o satisfacción tiene un encuentro deportivo de esta índole?

-Contestando a la primera pregunta, desde luego. Respecto a la segunda cuestión, mucha y buena repercusión pues se me han abierto algunas puertas a las que no había llamado.

-Aunque usted es un mito fuera y dentro de nuestras fronteras, también dispone de tiempo para involucrarse en campañas solidarias. De hecho, este año, prestará su imagen a la II Caminata de la Fundación Banco de Alimentos de Valladolid. ¿Qué le ha llevado a aceptar esta decisión?

-En primer lugar, el honor es mío, pues el hecho de que contéis conmigo en esta campaña solidaria, me enorgullece. Estoy encantada de poder colaborar, pero sobre todo, de que hayáis pensado en mí para llevar a cabo un evento como éste.

-¿Conoce el trabajo que se desarrolla dentro de nuestra Fundación?

-Sí, y reconozco que es una labor extraordinaria.

- ¿Qué es lo que más valora de nuestra entidad?

-La disposición y entrega. Y, por supuesto, la iniciativa de llevar a cabo una “Caminata Solidaria”, que este año cumple su segundo año.

-¿Cómo cree usted que podríamos alentar a todas esas familias que no están pasando por su mejor momento?

-Ayudándoles a luchar siempre, a no venirse abajo, mostrándoles una actitud positiva ante la vida y haciéndoles saber que hay entidades como la vuestra, que están dispuestas a ayudar, a colaborar, a echarles una mano en esos momentos difíciles, sin dejarles de lado para que no se encuentren solos.

Más Personal… 

1.- Un reto…

La educación de mis hijos (tanto en valores, como emocional, además de lo académico).

2.- Una disciplina deportiva…

¿Sólo una?, el fondo.

3.- Una marca…

Maratón de Barcelona. Marzo de 2012 : 2h 30´52” 

4.- Una ciudad…

Mi ciudad natal: Valladolid.

5.- Un nombre…

Familia.

Elena Espeso - Atleta olímpica vallisoletana
Elena Espeso - Atleta olímpica vallisoletana
Elena Espeso - Atleta olímpica vallisoletana
Elena Espeso - Atleta olímpica vallisoletana